sábado, 13 de junio de 2009

Destino o casualidad?

Te cuento...

Salió publicado ayer en los medios de comunicación una noticia sobre una mujer que se había salvado de morir en el accidente aereo de AirFrance pero luego tuvo un accidente automovilístico y falleció.

La señora en cuestión y su esposos salvar sus vidas al llegar tarde a tomar el vuelo en Río de Janeiro, lo que los forzó a tomar otro el día siguiente que los dejaba en Austria. Por este cambio de itinerario decidieron conducir desde Austria hasta Italia, y fue en este trayecto donde perdieron el control del vehículo y chocaron contra un camión, provocando la muerte de la mujer y dejando en estado crítico al esposo.

Esta historia, que me hace recordar a todas las películas de Final Destination, me lleva a cuestionarme sobre si de verdad venimos al mundo con un destino escrito o si es pura casualidad y mala suerte.

Personalmente, nunca he creído en la casualidad, sino que más bien todo pasa por algo en la vida, ya sea para bien o para mal. Cada cosa y cada mínimo detalle tiene un impacto en nuestras vidas y nos deja algo, aunque no nos demos cuenta o no lo entendamos.

Siempre he oído decir que "lo que te mata es la hora", es decir, cuando te vas a morir, cuando te llega la hora de morir, por más cosas que hagas no está en tus manos cambiar el destino. Y esta historia, definitivamente da fe a esa frase.

Posdata: No debemos de dejar que las cosas importantes en nuestras vidas vengan por "buena suerte" o por "casualidad", sino que debemos de trabajar día a día en construír nuestra felicidad y nuestros éxitos, ya que al final eso es lo que llamamos buena suerte en las personas, que sean exitosas y felices. También, vivamos nuestras vidas día a día y saquemos lo mejor de ella, porque no sabemos cuándo se nos acabará el tiempo.

1 comentario:

  1. A mi no me gusta pensar que haga lo que yo haga, no voy a estar en control de mi destino. Nadie nunca va a tener una respuesta definitiva entre destino, coincidencia y libre arbitraje sin embargo a mi me da mas comfort pensar que yo tengo libre arbitraje y mis decisiones son las que determinan mi destino.

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